domingo, 3 de octubre de 2010

Los efectos económicos negativos a corto plazo del proceso actual de consolidación fiscal

El tercer de los capítulos del informe sobre las Perspectivas de la Economía Mundial de FMI de octubre de 2010 (World Economic Outlook) está dedicado al estudiar el impacto que tendrá en la economía mundial los distintos planes de consolidación fiscal (aumentos de impuestos y reducciones del gasto público) que están en marcha en la mayoría de las economías avanzadas.

Existe un consenso entre los economistas que para restablecer la sostenibilidad de las finanzas públicas a medio y largo plazo, muchas economías avanzadas deben reducir sus déficit públicos. El informe estudia los procesos de consolidación fiscal de los últimos treinta años en economías avanzadas y evalúa con un nuevo enfoque los efectos a corto plazo sobre la actividad económica. El análisis advierte de los mayores efectos negativos a corto plazo sobre la producción y el empleo de estos planes de consolidación fiscal, en comparación con lo observado en anteriores episodios de ajuste fiscal.

En estudios empíricos previos [Giavazzi y Pagano (1990, 1996), Alesina and Perotti (1995, 1997) y  Alesina y Ardagna (1998, 2010)] se ha estimado que el ajuste fiscal puede ser expansivo (aumentar la producción y el empleo) a corto plazo. El informe del FMI advierte que los métodos utilizados en estos trabajos académicos utilizan un método para identificar los procesos de ajuste fiscal (el aumento en el superávit presupuestario cíclicamente ajustado) que tienden a sobreestimar los efectos expansivos y a subestimar los efectos negativos. Para obviar estos problemas los economistas del FMI utilizan un enfoque alternativo para identificar los episodios de consolidación fiscal, centrándose en la evidencia de medidas de política fiscal que hayan tenido como objetivo la reducción del déficit presupuestario.

Del análisis alternativo efectuado por el FMI de los episodios históricos de consolidación fiscal (1980-2009) se pueden extraer varias conclusiones:

En primer lugar, la consolidación fiscal frena la actividad económica en el corto plazo. Al cabo de dos años, una reducción del déficit público del 1% del PIB reduce un 1% la demanda interna (consumo e inversión) y hace aumentar la tasa de desempleo en 0,33 puntos porcentuales. Además, como las exportaciones netas (exportaciones menos importaciones de bienes y servicios) aumenta cuando se realiza una política fiscal restrictiva, el impacto neto sobre el PIB es de un 0,5% (véase gráfico adjunto. Hacer clic sobre el mismo para verlo más grande).



En segundo lugar, tres factores tienden a moderar el efecto negativo a corto plazo de la consolidación fiscal.
  • Los bancos centrales reducen sus tipos de interés y se produce una depreciación de la moneda nacional, lo que aumenta la competitividad exterior y, en última instancia, compensa el efecto negativo de la demanda interna.
  • El ajuste fiscal tiene menos costes si los mercados financieros están preocupados por la sostenibilidad fiscal del país.
  • Las consolidaciones fiscales tienen menos efectos negativos si el ajuste se hace con reducciones de gasto público que con aumentos de impuestos (véase gráfico adjunto). Esto es así en parte, porque la experiencia muestra  que los bancos centrales reducen en mayor medida los tipos de interés después de reducciones del gasto público.

En tercer lugar, la consolidación fiscal tiene un efecto positivo a largo plazo sobre la producción. En concreto, la reducción del stock de deuda pública en % del PIB tiende a reducir los tipos de interés reales y los costes del servicio de la deuda, lo que permite reducir los impuestos futuros. Este doble mecanismo estimula la inversión productiva privada, y conduce finalmente a un aumento de la producción a largo plazo.

No obstante, el informe del FMI advierte que en las circunstancias actuales, estos factores más arriba mencionados pueden incidir de manera diferente y por ello, la consolidación fiscal podría tener más efectos negativos a corto plazo que lo habitual.

La razones de que los procesos de consolidación actuales tengan mayores efectos negativos a corto plazo sobre la producción y el empleo de lo observado en anteriores episodios de ajuste fiscal son dos, y ambas afectan en particular, al caso de la economía española.

En primer lugar, en muchas economías avanzadas han agotado las posibilidades de realizar políticas monetarias expansivas reduciendo los tipos de interés, puesto que los mismos están cerca de cero y los bancos centrales tienen menos margenes de maniobra.

En segundo lugar, si muchos países llevan a cabo el ajuste al mismo tiempo, los costes en términos de caída de la producción serán mayores porque no todos las economías pueden provocar una depreciación nominal de su  moneda y aumentar las exportaciones netas al mismo tiempo. La excepción son los países con alto riesgo de incumplimiento de pago de su deuda, en los que los efectos negativos a corto plazo del ajuste fiscal será probablemente menores. Este efecto atenuador tiene que ver con las ganancias de credibilidad que los mercados otorgan a los gobiernos con riesgo alto de impago, una vez iniciado el plan de ajuste fiscal. 

La simulaciones efectuadas por los economistas del FMI muestran que la caída de la producción podría ser más de dos veces mayor que en el caso general si los bancos centrales no pueden reducir sus tipos de interés, y si todos los países llevan a cabo el ajuste fiscal simultáneamente. Esto es el caso claramente de los países de  la zona del euro.

En síntesis, los procesos de consolidación fiscal tienen efectos positivos a largo plazo sobre la producción y el empleo pero los efectos negativos pueden ser mayores que los registrados en episodios anteriores de ajuste presupuestario.

viernes, 24 de septiembre de 2010

Predicciones sobre el Premio Nobel de Economía 2010

Llega la época de hacer las "porras" académicas de quién (o quienes) serán los agraciados con el Premio Nobel de Economía. El lunes 11 de octubre la Fundación Nobel anunciará quién es el ganador del año 2010.

Una primera predicción sería utilizar la lista de los 10 economistas que tienen más citas en sus artículos publicados en revistas científicas según la base de datos de RePEc. Como cuatro de ellos ya tienen el Premio Nobel (el número 3, James J. Heckman; el número 4, Joseph E. Stiglitz; el número 5, Robert E. Lucas Jr., y el número 8, Edward C. Prescott), una posible predicción ganadora sería escoger entre los seis restantes por orden en el ranking: 1) el número 1, Andrei Shleifer de Harvard University, Cambridge, EE.UU.;  2) el número 2, Robert Barro de Harvard University, Cambridge, EE.UU.; 3) el número 6,  Mark L. Gertler, de New York University, EE.UU.; 4) el número 7, Olivier Blanchard, del M.I.T. (Massachusetts Institute of Technology), Cambridge, EE.UU., aunque actualmente está en excedencia y ocupa el puesto de Consejero Económico y Director del Departamento de Estudios del Fondo Monetario Internacional; 5) el número 9, Ross Levine, de Brown University, Providence, EE.UU.; 6) y el número 10, Daron Acemoglu del M.I.T. (Massachusetts Institute of Technology), Cambridge, EE.UU.

La segunda predicción vendría de la mano de la empresa Thomson Reuters, cuya División de Ciencia, ISI Web of Knowledge, se ocupa de construir bases de datos de la actividad científica por áreas y países. La más conocida es el Journal of Citation Reports Web, base de datos que ofrece un medio sistemático y objetivo para evaluar de manera crítica las revistas científicas más importantes del mundo. En concreto, JCR Web permite medir la influencia y el impacto de las investigaciones realizadas (a nivel de revistas y por áreas de investigación) y muestra las relaciones entre las revistas que citan y las que son citadas.

La apuesta ganadora de Thomson Reuters es para cuatro economistas:
  1. Alberto Alesina, catedrático de Economía de Harvard University, Cambridge, EE.UU., por sus estudios teóricos y empíricos sobre la relación entre la política y la eocnomía y, en especial, por sus investigaciones sobre el ciclo político-económico.
  2. Nobuhiro Kiyotaki, catedrático de Economía de Princeton University, Princeton, EE.UU. y John H. Moore, catedrático de Economía de la Universidad de Edinburgh y de la London School of Economics, Reino Unido, por la formulación del modelo Kiyotaki-Moore del ciclo económico, que muestra cómo el sistema financiero puede servir de mecanismo amplificador de los ciclos económicos.
  3. Kevin M. Murphy, catedrático de Economía de la Universidad de Chicago, EE.UU., por su investigación empírica en temas de economía social, tales como la desigualdad salarial, el desempleo, la adicción racional, el valor económico de la investigación médica y el crecimiento económico. 
Aunque me alejo de las profecías seguras de Thomsom Reuters, ya saben que a mí me gusta el riesgo, y si pudiera votar yo le daría el Nobel a Robert J. Barro, Catedrático de Economía de la Universidad de Harvard. Sus contribuciones se centran en el campo de la Macroeconomía: a) la teoría de la deuda pública en los años setenta; b) la macroeconomía del equilibrio en los años ochenta; y c) la teoría crecimiento económico en los años noventa. Además, es uno de los economistas más citado en las revistas científicas del área de Economía. Lo curioso, es que Barro sigue el patrón de algunos de los mejores economistas americanos: no estudió en principio la carrera de Economía, aunque posteriormente obtuvo el Doctorado en nuestra disciplina. Su Licenciatura fue en Física. Recuerden que en 2008 y 2009 ya aposté en dos entradas del Blog por Robert J. Barro y me equivoque. Pero soy capricornio.

lunes, 20 de septiembre de 2010

El déficit de la balanza por cuenta corriente de los países periféricos de la zona del euro y la ineficiente asignación de los flujos de capital exterior, 2004-2008

El déficit o superávit de la balanza por cuenta corriente de una economía abierta refleja el saldo de los ingresos y pagos por operaciones comerciales, servicios, rentas y transferencias corrientes con el exterior. Si al déficit o superávit por cuenta corriente le añadimos el saldo de la balanza por cuenta de capital se obtiene la necesidad o capacidad de financiación de la economía nacional con el resto del mundo.

En esta entrada del Blog nos ocupamos de dos cuestiones relacionadas con el desequilibrio exterior. Por un lado, mostramos la contrapartida  macroeconómica de los déficit de la balanza por cuenta corriente acumulados durante los años pre-crisis económica (2004-2008) por los cuatro países periféricos de la zona del euro (España, Irlanda, Grecia y Portugal). Por otro lado, nos preguntamos si los flujos exteriores de capital obtenidos para su financiación fueron asignados de manera eficiente en sus economías (en otra Entrada del Blog nos centrábamos con más detalle en el caso de la economía española a finales de 2007, justo antes de iniciarse la crisis financiera internacional y la crisis económica).

En ambas cuestiones, existen diferencias importantes entre las cuatro economías de la zona del euro. En relación a la primera de las cuestiones, como se puede observar en el gráfico adjunto (hacer clic sobre el mismo para verlo más grande), en los años anteriores a la crisis económica (2004-2008) el déficit por cuenta corriente de estos países fue creciendo de manera persistente hasta alcanzar el máximo en % del PIB en 2007/2008 (-5,3% Irlanda (2007); -10,0% España (2007); -12,1% Portugal (2008); -14,7% Grecia (2007)).



Desde le punto de vista macroeconómico el saldo de la balanza por cuenta corriente puede expresarse como la diferencia entre el ahorro nacional total (público y privado e incluyendo el saldo de la balanza por cuenta de capital para simplificar) y la inversión nacional neta (inversión bruta menos depreciaciones). Así, el déficit por cuenta corriente puede reflejar una baja tasa de ahorro nacional en comparación con la inversión, o una tasa de inversión elevada, o una combinación de ambas. Desde este punto de vista,  una  economía que arrastra en el tiempo un déficit persistente en la balanza por cuenta corriente utiliza capital extranjero para financiar la diferencia entre la inversión y el ahorro internos y, en última instancia, se convierte en un país prestatario neto de fondos externos, con la consiguiente acumulación de deuda exterior neta (con más precisión se deteriora su "posición de inversión internacional neta (PII)").


En todos los casos, la PII neta negativa ha ido creciendo de manera persistente en el tiempo hasta alcanzar en % del PIB el -55% en Irlanda (2008), el -86% en Grecia (2009), el -92% en Portugal (2008) y el -93,6% en España (2009).


Aunque los cuatro países muestran un aumento de su déficit por cuenta corriente con el exterior y un deterioro de su PII neta negativa, el origen macroeconómico de este desequilibrio exterior no es similar. Como se puede ver en el gráfico, por un lado se sitúan España e Irlanda, dónde el desequilibrio exterior y la consiguiente acumulación de deuda exterior tiene su origen en el vigoroso aumento de la inversión nacional. Por otro lado, se sitúan Portugal y Grecia, cuyo origen del problema exterior proviene de la significativa caída del ahorro nacional total.


Centrémonos en la segunda cuestión. La generación de déficit por cuenta corriente, la atracción de flujos de capital necesarios para su financiación y la consiguiente acumulación de deuda externa no son un problema en si mismo. La cuestión relevante es si los flujos de capital exterior son asignados a una actividad productiva eficiente en un  doble sentido: a)  si los préstamos del resto del mundo han ido financiando una inversión con una productividad marginal más elevada que la tasa de interés (o de rendimiento) que reciben los acreedores externos; b) y quizá más importante, si estas actividades productivas pueden sostenerse indefinidamente en el tiempo para generar ese flujo de ingresos necesarios para pagar la deuda exterior acumulada en el tiempo.


La experiencia reciente de estos cuatro países ha ido en contra de está condición de asignación eficiente de recursos. Al contrario, los flujos de capital exterior que han financiado el déficit por cuenta corriente en el periodo 2004-2008 se ha asignado claramente a financiar inversiones productivas que se han mostrado a posteriori claramente ineficientes.  Pero cada caso es nuevamente diferente.


En lo que respecta a España e Irlanda, las entradas de capital fueron destinadas básicamente a la inversión en construcción y en vivienda, lo que que terminó generando una "burbuja inmobiliaria". En Grecia, los flujos de capital exterior fueron destinados a financiar el elevado déficit público, desequilibrio que escondía la elevada ineficiencia y el sobredimensionamiento del sector público del país (AA.PP. y empresas públicas). Por último, en el caso de Portugal los fondos fueron destinados a financiar un exceso del consumo privado.


La crisis financiera internacional y la consiguiente crisis económica sólo hizo que precipitar el necesario ajuste de un déficit por cuenta corriente insostenible en el tiempo. En definitiva, el desequilibrio externo reflejaba un desajuste macroeconómico interno también insostenible y un modelo de crecimiento y de asignación de recursos ineficiente (véase al respecto, European Commission (2010), Surveillance of the Euro Area – Competitiveness and Imbalances, European Economy, No 1).

domingo, 12 de septiembre de 2010

Los abultados déficit fiscales y el elevado riesgo de impago de la deuda pública de algunos Estados de EE.UU.

Desde que comenzó la crisis financiera internacional los inversores internacionales han aumentado su aversión al riesgo de los títulos de deuda pública de aquellos países en los que se prevé que los crecientes (y persistentes) déficit fiscales pueden entrañar un mayor riesgo de impago ("default") en el futuro. Una buena manera de aproximar este cambio de percepción de los mercados (el aumento del nivel de desconfianza o del riesgo) es a través del comportamiento reciente de los precios de los "Credit Default Swaps" (CDS) vinculados a estos bonos soberanos. En definitiva, las cotizaciones de los CDS de la deuda soberana aproximarían una parte del llamado "riesgo-país" o "riesgo de impago" de la deuda pública.

Aunque la mayor parte de atención de los analistas se ha centrado en el "riesgo-país" de algunos países de la OCDE, el importante y continuo aumento de los desequilibrios fiscales de muchos Estados de EE.UU. (en el caso español de las CC.AA.) ha despertado el interés en los mercados financieros internacionales por el seguimiento de los CDS de la deuda pública de los Estados americanos.


En el gráfico (hacer clic sobre el mismo para hacerlo más grande) se presenta las cotizaciones (a principios de septiembre de 2010) de los mercados de los CDS de los títulos de deuda pública con vencimiento a 5 años de un conjunto amplio de Estados de EE.UU. La lista está ordenada de mayor a menor coste de los CDS de la deuda pública del Estado en cuestión, es decir, de mayor a menor "riesgo-país". Recordemos que los precios de los CDS de la deuda pública representan el coste por año de asegurar un montante de 10.000 dólares de los títulos del Estado.

Como puede observarse, Illinois tiene el riesgo más alto de incumplimiento de sus pagos de intereses de su deuda pública con una cotización de sus CDS de 303,2 puntos básicos. Esto implica que el coste de asegurar contra el riesgo de impago o de "default"  un título de deuda pública del Estado de IIlinois cuyo montante sea de 10.000 dólares es nada menos que del 3,03% anual (coste que reduce considerablemente su rendimiento nominal).

A continuación figuran los Estados de California, Michigan, Nueva York y Nueva Jersey, cinco Estados muy importantes por su población y por su participación relativa en la producción de los EE.UU. No resulta sorprendente esta cotización de los mercados de CDS, ya que estos cinco Estados presentan desequilibrios muy elevados en sus presupuestos del último ejercicio fiscal 2009/2010. La gravedad de la situación se puede constatar por el hecho de que Goldman Sachs ya recomendó en 2009 a sus clientes que si compraban  títulos de deuda pública del Estado de  California (y de otros 10 Estados) deberían cubrirse del posible  riesgo de impago mediante la adquisición simultánea de un CDS.

En relación a esta situación, un estudio sobre las finanzas públicas de los Estados de EE.UU. elaborado por el Centro Pew ha revelado que estos cinco Estados (entre otros) presentaban en el ejercicio fiscal 2009-2010 déficit fiscales en % de su PIB de dos dígitos (Illinois: -47,3%; California: -49,3%; Michigan: -12%; New York: -32,3%; New Jersey: -29,9%). Todos estos Estados han tenido que introducir planes de ajuste para el vigente ejercicio fiscal 2010-2011 para alejarse de la posibilidad de bancarrota.

Resulta curioso que estos desequilibrios fiscales son mucho más elevados que los registrados por algunos países europeos y que han supuesto la aplicación en 2010 de severos proyectos de consolidación fiscal, los cuales fueron aprobados por las dudas de los mercados sobre la posibilidad de incurrir en un impago de su deuda (déficit fiscales en % del PIB para 2009: Irlanda -14,3%; Grecia: -13,6%; España: -11.2%; Portugal: -9,4%).

Los problemas fiscales se acumulan a la economía americana y no sólo por el abultado déficit federal.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Reflexiones del jefe de la misión del FMI para España de las perspectivas de la economía española

En una reciente entrevista, Daniel James, economista y jefe de la misión del FMI para España, reflexiona sobre las perspectivas de la economía española y sobre las reformas abordadas necesarias para salir de la recesión económica. Las reflexiones provienen del último informe preparado por el FMI sobre la economía española.

Estas son sus principales puntos de vista:
  • El reciente plan de austeridad y ajuste fiscal aprobado por el Gobierno es suficiente para asegurar la sostenibilidad de las finanzas públicas a medio plazo (situar al déficit público total en el 3% del PIB) y para recuperar la confianza de los mercados financieros siempre que sea acompañado con una reforma del sistema público de pensiones (véase al respecto una entrada reciente del Blog).
  • La reciente reforma del mercado de trabajo va también en la dirección correcta. El economista del FMI insiste que era necesario corregir la excesiva protección del que disfrutaban los trabajadores con contratos indefinidos. No obstante, sería conveniente avanzar también en otras disfuncionalidades del mercado de trabajo como el proceso de fijación de los salarios. En este sentido, habría que aprovechar el debate parlamentario para reformar el proceso de negociación colectiva.
  • La funcionario del FMI es relativamente optimista en la recuperación del crecimiento económico española a medio plazo. La reformas estructurales van en la dirección correcta, las exportaciones se han comportado bien y el país tiene un elevado potencial de crecimiento al tener una estructura productiva  diversificada. La nueva etapa de crecimiento llegará cuando se termine la dependencia de la economía del sector de la construcción y de la vivienda, se reasigne la mano de obra en otros sectores, se reduzca suficientemente el nivel de endeudamiento de las familias y de las empresas, y se termine el proceso de saneamiento de parte del sector bancario, en especial de las cajas de ahorro.
  • Finalmente, destaca como positivo la situación del sector bancario en su conjunto, tanto por su solidez como por el hecho de que está bien supervisado.
En el siguiente vídeo se muestra un extracto de la entrevista. Y de paso practiquen el inglés:




sábado, 31 de julio de 2010

Llega el cierre veraniego del Blog

Voy a pasar el resto del verano lejos de mis despachos de la Universidad de Valencia y de la Universidad de La Laguna (y de mis conexiones de alta velocidad de internet). En realidad, las tres niñas me ocupan todo el día y, por lo tanto:

  • Voy a interrumpir mi Blog hasta la primera semana de septiembre.
  • Voy a dejar de contestar a mi correo electrónico (bueno a casi todo).
  • Voy a intentar alejarme de la Economía (si me dejan las noticias)
  • Voy a abandonar el puente aéreo Valencia-Santa Cruz de Tenerife: el IB8094 y el IB8095.
  • Voy a prepararme psicológicamente para la que se nos viene encima (sólo mediáticamente, eso espero) el curso que viene con el ajuste fiscal adicional y las negociaciones para los Presupuestos Generales del Estado para el año 2011.
Ahora, voy a leer libros con mi nuevo iPad, cocinar arroces para la familia, vamos a visitar Barcelona, iremos a la playa de Alicante una semana y también disfrutaremos de la piscina de nuestra casa de Llíria. Un mes de agosto intenso.

Nueva Cátedra Institucional de Investigación de Economía y Finanzas Internacionales de la Universidad de La Laguna

Desde hoy voy a ejercer de Director de una nueva Cátedra Institucional en la Universidad de La Laguna en Tenerife.

La Fundación ICO del Ministerio de Economía y Hacienda y el Cabildo de Tenerife - por iniciativa de la Consejería de Economía y Competitividad - patrocinan esta Cátedra de Investigación de Economía y Finanzas Internacionales de la Universidad de La Laguna (ULL), que representa un foro de encuentro entre el mundo académico universitario y el empresarial de las Islas Canarias en todo lo referente a la economía y las finanzas internacionales.

En el contexto de este convenio de colaboración institucional, la Cátedra de Economía y Finanzas Internacionales en la ULL tiene como objetivo fundamental convertirse en un referente académico en el proceso de internacionalización de la economía canaria.

El patrocinio de Cátedras Institucionales de Investigación universitarias por parte de empresas y de instituciones públicas es un fenómeno reciente de colaboración entre la universidad española y la sociedad, aunque es necesario recordar que se trata de un mecanismo ya tradicional en los países anglosajones.

La Cátedras Institucionales se configuran como instrumentos para el desarrollo de la formación, la investigación y la difusión de la ciencia y el conocimiento de una materia concreta de un área de conocimiento científico.

Las Cátedras Institucionales suponen también que los patrocinadores se asocian con valores que la sociedad actual considera como muy positivos y que a largo plazo se pueden capitalizar en los patrocinadores: a) la dedicación a la investigación de calidad; b) la preocupación por las grandes cuestiones de la sociedad actual; y c) el esfuerzo desinteresado por tratar de resolverlos.

miércoles, 21 de julio de 2010

El gasto público en sanidad sigue creciendo en los países de la OCDE

La OCDE acaba de publicar los últimos datos disponibles del gasto total en sanidad (privado y público) de los países miembros. Los datos hasta el año 2008 se pueden consultar en la publicación OECD Health Data 2010: Statistics and Indicators. En todos los países de la OCDE el gasto total en sanidad sigue creciendo más rápidamente que el PIB y la media en % del PIB ha pasado del 7,8% en el año 2000 al 9,0% en el año 2008, último dato disponible (véase gráfico adjunto; hacer click sobre el mismo para hacerlo más grande). Por un lado, EE.UU. es la economía con un  mayor gasto total en sanidad con el 16,0% del PIB, aunque también es el país con una proporción mayor del gasto sanitario privado. Por otro lado, en el gráfico se puede observar que en aquellos países que en el año 2008 se registró una gran caída del crecimiento real, el gasto total en sanidad continúo creciendo a pesar de la recesión.  En este grupo sobresale el caso de Irlanda, donde la ratio sobre el PIB del gasto total en sanidad pasó del 7,5% en 2007 al 8,7% en 2008, mientras que en España se elevó del 8,4% al 9,0%.




Los factores que impulsan al alza el gasto total en salud son tres: a) Las expectativas de crecimiento de la población; b) el envejecimiento de la población; y c) la introducción de mejoras tecnológicas al campo de la salud. El informe de la OCDE señala que estos factores continuarán aumentando los costes sanitarios en un futuro.

Uno de los factores que más está impulsando el aumento del gasto en salud en las últimas décadas es la introducción de nuevas tecnologías médicas que tienden a mejorar el diagnóstico y el tratamiento de los pacientes. El informe muestra que ha habido un rápido crecimiento en la utilización de la Tomografía Axial Computerizada (TAC)  y de la Imagen por Resosancia Magnética (MRI).

Como se puede ver en los dos gráficos adjuntos, las unidades de MRI per cápita más que se duplicaron  en promedio entre los países de la OCDE entre 2000 y 2008, hasta alcanzar las 13 unidades por millón de habitantes en 2008, frente a las 6 unidades de media en el año 2000. Adicionalmente, el número de equipos de TAC alcanzó las 24 unidades por millón de habitantes en 2008, frente a las 19 unidades en el año 2000. Estas tecnologías son caras de adquirir y su coste por diagnóstico es muy elevado. Además no está clara su eficacia generalizada en muchos casos.































Dadas la cifras de crecimiento imparable de los gastos públicos en sanidad y la urgencia de reducción de los déficit públicos en la mayoría de los países de la OCDE, muchos gobiernos deberán en los próximos años abordar una reforma en profundidad de los sistemas públicos de salud. Si no se reduce el gasto sanitario, las autoridades económicas se verán obligadas a reducir otros programas de gasto público y/o a introducir el copago de los ciudadanos en el ámbito de la salud (nuevos impuestos).

Se abre otro frente más para el Gobierno de España en el ajuste fiscal de los años 2011 y 2012. Tiempo al tiempo.

martes, 13 de julio de 2010

Evolución histórica de las variables macroeconómicas fiscales de la economía española, 1964-2009

Esta entrada del Blog es una actualización de la entrada de 28 de octubre de 2009.

Se presenta la senda temporal de las principales variables macroeconómicas de las AA.PP. españolas (medidas en % del PIB) actualizadas para el periodo 1964-2009. Por tanto, se ha añadido la cifra provisional del año 2009 y se han corregido las cifras de los años 2006-2008 con datos actualizados.

Me gustaría destacar los dos últimos periodos de la historia presupuestaria de la economía española: a) el ajuste fiscal del periodo 1996-2007; y b) el deterioro brusco y profundo de las Finanzas Públicas en los años 2008 y 2009, después del inicio de la crisis económica derivada de la crisis financiera internacional.

En el primer gráfico (hacer click sobre el mismo para verlo más grande) aparece la evolución de los ingresos totales, los gastos totales y los gastos netos de intereses de la deuda pública. Destacar el hundimiento de los ingresos desde el año 2008 y el crecimiento de las dos variables representativas de los gastos públicos.


















En el segundo gráfico se presenta la evolución del ahorro bruto total de las AA.PP. y del ahorro bruto excluido los pagos de intereses de la deuda pública. La primera variable se obtiene del saldo conjunto de las cuentas corrientes (ingresos y gastos corrientes) de las AA.PP. (cuentas de producción, distribución y utilización de la renta). El ahorro bruto, que había crecido ininterrumpidamente en una década (desde 1997 a 2007), ha retrocedido bruscamente en el año 2008 y ha alcanzado en 2009 hasta niveles no conocidos en esta serie histórica.


















En el gráfico 3 se presenta la evolución temporal del superávit o déficit de las AA.PP. total y primario (excluidos los pagos de intereses de la deuda). Con más precisión, se trata de la capacidad (+) o necesidad de financiación (-) total y neta de intereses, obtenida como suma del ahorro bruto y del saldo de la cuenta de capital de las AA.PP. En este caso, se incluye además de los ingresos y gastos públicos corrientes, los ingresos y los gastos de capital de las AA.PP., incluida la inversión pública, entre otras partidas. Como se puede observar, el ajuste fiscal comienza en el año 1995 (año en el que se alcanzó un déficit público record hasta la fecha del -6,6%), para posteriormente reducirse en años sucesivos el déficit hasta el año 2004, y generándose superávit públicos crecientes en el periodo 2005-2007. Nuevamente, el 2008 marca un cambio de tendencia brusco, al resurgir cifras de déficit público total del -3,8%, cifras no registradas desde el año 1996. Finalmente, en el año 2009 se ha alcanzado la cifra record en estos 46 últimos años de historia de la hacienda pública española: un -9,4% de déficit público primario y un -11,2% de déficit público total.


















En el gráfico 4 se muestra la senda temporal de dos variables representativas del stock de deuda pública de las AA.PP. La primera es el stock de deuda pública total medido por el conjunto de los pasivos financieros totales de las AA.PP. En el segundo caso, el stock de deuda pública (menor en niveles por las partidas que incluye) es construido según la metodología del Protocolo de Déficit Excesivo (PDE) incluido en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la zona del euro (esta es la cifra oficial que pública el Banco de España y el Banco Central Europeo sobre el total de la deuda pública española). En ambos casos la reducción es espectacular desde el año 1996, y nuevamente se produce un deterioro muy significativo en 2008 y sobre todo en el año 2009.


















Por último, destacar que las previsiones disponibles para 2010 y 2011 por la Comisión Europea son una caída de déficit público total hasta el  -9,8% y el -8,8% del PIB, respectivamente. También se prevé que esa caída de un punto porcentual del déficit en el 2011 tenga su origen en una reducción equivalente del gasto público total (la recaudación impositiva se mantendría constante en porcentaje del PIB). Si tenemos en cuenta que los intereses de la deuda se preve que suban en 0,4 puntos porcentuales, la caída del gasto público neto de intereses debería ser de 1,4 puntos porcentuales sobre el PIB. Esto implica un ajuste en los presupuestos de las AA.PP. para 2011 de aproximadamente 14500-15000 millones de euros adicionales a los ya aprobados en el año 2010. En definitiva, se espera mucho trabajo para el Ministerio de Economía y Hacienda (y para las CC.AA. y Entidades Locales, en su caso) para el próximo otoño. ¿De dónde se va a recortar ahora? ¿Reducción de plantillas de empleados públicos (interinos y contratados; lógicamente, personal no funcionario)? ¿Prestaciones por desempleo? ¿Gasto en sanidad?

Por lo que respecta al déficit público primario, la Comisión Europea prevé una caída del desequilibrio para 2010 y 2011, hasta alcanzar el -7,6% y el -6,2% en términos de PIB, respectivamente. Y en lo que concierne al stock de la deuda pública -según  la metodología del Protocolo de Déficit Excesivo (PDE)- se vaticina un aumento del mismo hasta el 64,9%  y el 72,5% del PIB para finales del año 2010 y del 2011, respectivamente. Esta última cifra de 2011 sería el máximo histórico desde 1996, cuando se alcanzó un nivel de stock de deuda pública sobre el PIB del 66,1%.

martes, 6 de julio de 2010

Los diez mandamientos del FMI para el ajuste fiscal y el crecimiento económico sostenido de las economías avanzadas

Olivier Blanchard y Carlo Cottarelli, economista jefe y Director del Departamento de Finanzas Públicas del FMI, respectivamente, han publicado recientemente en el Blog del FMI algunas recomendaciones de ajuste fiscal para las economías avanzadas. El trabajo lleva por título Ten Commandments for Fiscal Adjustment in Advanced Economies ("Diez Mandamientos para el ajuste fiscal en las economías avanzadas"), y  en el mismo se  reconoce el difícil desafío al que se enfrentan las economías avanzadas al introducir severos programas de ajuste fiscal que no deben poner en peligro la frágil recuperación económica.

Por un lado, para el FMI el ajuste fiscal puede ser clave para recuperar los niveles de  inversión privada y el crecimiento económico a largo plazo. Incluso para algunos países puede ser útil para evitar las convulsiones recientes de los mercados financieros. Pero por otro lado, un ajuste fiscal excesivo puede frenar el crecimiento económico de muchas de las economías avanzadas. La habilidad de la política económica es diseñar una estrategia fiscal que haga a la vez posible las necesidades de reducción de los desequilibrios de las finanzas públicas  a corto plazo con las necesidades de crecimiento económico a largo plazo.

Ante este dilema de política económica, los dos economistas del FMI ofrecen estos diez mandamientos a modo de guía, y recomiendan tres ejes fundamentales: 1) La transparencia de las medidas de política económica; 2) una calibración adecuada de los objetivos de la política fiscal; y 3) un conjunto de reformas estructurales que acompañen al ajuste fiscal y propicien un crecimiento económico sostenible a medio y largo plazo.

Estos son los Diez “mandamientos” del FMI:

Primer mandamiento: Diseñaras un plan fiscal a medio plazo (cuatro o cinco años) que sea creíble

Los economistas del Fondo entienden que hay que hacer una proyección presupuestaria a un horizonte temporal de cinco años y dar detalles específicos de los programas de gastos y de proyecciones de ingresos públicos con el apoyo de reformas estructurales de las economías.

Segundo mandamiento: No adelantarás el ajuste fiscal salvo que las necesidades de financiación del sector público del país así lo exijan

El FMI advierte que es más importante -para el acceso a los mercados para financiar el déficit público y para mantener la credibilidad del gobierno- el ritmo promedio de ajuste fiscal que el montante total final del mismo.

Tercer mandamiento: Procurarás una reducción a largo plazo de la ratio deuda pública/PIB, no solo una estabilización en los niveles posteriores a la crisis

El estancamiento económico en curso se debe no sólo a la crisis financiera internacional, sino también a qué la política fiscal ha estado mal gestionada durante el periodo de "boom" económico. El Fondo opina que un elevado stock de deuda pública tiende a elevar las tipos de interés, reduce el crecimiento potencial, e impide la flexibilidad fiscal. El objetivo del gobierno debe ser ahora reducir la ratio del stock de deuda pública sobre el PIB de manera gradual pero también de una manera sostenida en el tiempo.

Cuarto mandamiento: Centrarás la atención en las herramientas de consolidación fiscal que propicien un fuerte crecimiento potencial

El FMI se manifiesta a favor de los programas de transferencias públicas que proteja a la población con más bajos ingresos pero a su vez apoya el recorte de los sueldos de los empleados públicos porque en algunos países crecieron más que el PIB en los últimos años. El informe también señala que en algunos países -como EE.UU. y Japón- el ajuste fiscal también tiene que venir por el lado de los ingresos públicos. Se acabo el mensaje de las últimas décadas de los políticos de que no se subirían los impuestos.

Quinto mandamiento: Aprobarás pronto reformas de las pensiones y de los programas de gasto en sanidad porque las tendencias actuales son insostenibles

Los aumentos del gasto en pensiones y en sanidad contribuyeron a más del 80% del aumento de la ratio del gasto público primario/PIB registrado en las últimas décadas en los países del G-7. El valor presente neto de los aumentos futuros del gasto en sanidad y pensiones es diez veces mayor que el aumento de la deuda pública debido a la crisis. El Fondo señala que cualquier consolidación fiscal debe incluir reformas creíbles en estos dos programas de gasto público. Aunque algunas medidas en estos dos áreas de gasto sean políticamente costosas, tendrán efectos positivos a medio plazo sobre la demanda y la oferta agregada.

Sexto mandamiento: Serás justo. Para lograr la sostenibilidad a lo largo del tiempo, el ajuste fiscal debe ser equitativo

Por un lado, el FMI propone mantener los sistemas de seguridad social y la prestación de los servicios públicos que permitan la igualdad entre de los ciudadanos, independientemente de las condiciones iniciales en el momento de su nacimiento. Por otro, el Fondo recomienda la lucha contra el fraude fiscal (especialmente en la recaudación del IVA) como un elemento clave a la equidad.

Séptimo mandamiento: Pondrás en práctica reformas amplias para promover el crecimiento potencial

El informe señala que un aumento de 1 punto porcentual en el crecimiento potencial -suponiendo una presión fiscal del 40%- reduce la ratio del stock de deuda pública sobre el PIB en 10 puntos porcentuales en un horizonte de 5 años, y 30 puntos porcentuales en un horizonte de 10 años, siempre que el gobierno ahorre los mayores ingresos públicos generados por el mayor crecimiento económico.  Por lo tanto, será fundamental para asegurar el éxito del ajuste fiscal la aceleración de las reformas estructurales de los mercados laborales, financieros y de bienes y servicios, siempre que propicien el mayor crecimiento económico.

Octavo mandamiento: Fortalecerás tus instituciones fiscales

El FMI advierte que el éxito temporal del ajuste fiscal solo se asegura con determinadas instituciones fiscales.  Las instituciones fiscales actuales dejaron que se produjera una acumulación de deuda pública sin precedentes antes de la crisis económica. En opinión de los dos economistas se precisan mejores reglas fiscales, mejores procesos presupuestarios, y mejor supervisión fiscal, por ejemplo, mediante el impulso de organismos fiscales independientes.

Noveno mandamiento: Coordinarás adecuadamente las políticas monetaria y fiscal

El FMI recomienda que si se aplica una política fiscal más restrictiva, los tipos de interés no deberían incrementarse más rápidamente que en otras fases de recuperación económica. Las recomendaciones de algunos economistas de un endurecimiento de la política monetaria a corto plazo en las economías avanzadas son erróneas.

Décimo mandamiento: Coordinarás tus políticas económicas con las de otros países

En varios países avanzados, la reducción de los déficit públicos tiene que ir acompañada de una reducción de los déficit en la balanza por cuenta corriente. Ello implica que para mantener la recuperación económica, los efectos negativos iniciales en la demanda interna derivados del proceso de consolidación fiscal tienen que ser contrarrestados por los efectos positivos del impulso de la demanda externa (exportaciones). Pero esto presupone que en el resto del mundo ocurra lo contrario. De este modo, varias economías de mercados emergentes tienen que reducir sus superávit  en la balanza por cuenta corriente, y sustituir la demanda externa por la interna. En este sentido, las decisiones tomadas recientemente por China en relación a la apreciación del yuan constituyen una medida importante y positiva. La coordinación de las políticas a nivel mundial también será importante en ciertos ámbitos estructurales: por ejemplo, a medio plazo, será importante proteger la recaudación impositiva nacional de la creciente competencia tributaria internacional.

Imaginamos que en su reciente entrevista en Madrid, Olivier Blanchard le habrá entregado a José Luis Rodríguez Zapatero un ejemplar dedicado de la "Biblia del Ajuste Fiscal del FMI". Amén.