Canarias es una de las regiones españolas donde la crisis económica está teniendo una mayor incidencia negativa, tanto en reducción de las tasas de crecimiento económico como en el aumento de las tasas de desempleo. El mayor impacto negativo se debe a algunas peculiaridades estructurales que se circunscriben a algunas regiones españolas - incluida Canarias- que hasta 2007 estimularon buena parte del crecimiento relativamente mayor que la media española, pero que ahora están ejerciendo una mayor presión a la baja en las tasas de crecimiento económico y del empleo. Un reciente trabajo del Servicio de Estudios Económicos del BBVA (SEE BVA) ha profundizado en el estudio de la heterogeneidad del impacto de la actual crisis económica en las distintas regiones españolas.
En concreto, tres son los factores que están contribuyendo a un mayor deterioro económico de la economía canaria en el corto plazo y que pueden condicionar la recuperación en el medio plazo según este estudio: i) el mayor peso de la construcción; ii) el elevado apalancamiento financiero del sector privado (empresas no financieras y familias); y iii) la fuerte dependencia del sector turístico.
En concreto, tres son los factores que están contribuyendo a un mayor deterioro económico de la economía canaria en el corto plazo y que pueden condicionar la recuperación en el medio plazo según este estudio: i) el mayor peso de la construcción; ii) el elevado apalancamiento financiero del sector privado (empresas no financieras y familias); y iii) la fuerte dependencia del sector turístico.
En primer lugar, durante el periodo del boom inmobiliario (1999-2007) se registró en la economía canaria un peso muy superior del empleo en el sector de la construcción que la media española. Debido a este factor estructural, se puede observar en el Gráfico 1 como la destrucción de empleo total registrada hasta el segundo trimestre de 2009 ha sido más intensa en Canarias que en el conjunto de la economía española. En definitiva, el redimensionamiento del sector de la construcción es uno de los factores explicativos diferenciales del aumento de la tasa de paro estructural de Canarias.
En segundo lugar, la economía canaria ha registrado durante el periodo 1999-2007 uno de los niveles regionales de mayor apalancamiento financiero del sector privado. El apalancamiento del sector privado se suele aproximar por la ratio de los créditos menos depósitos en relación al PIB. Para el caso de Canarias se llegó a alcanzar en 2007 el 72,3 % del PIB, muy por encima de la media de la economía española (57,1%). Como consecuencia de la crisis financiera internacional, desde 2008 asistimos a un intenso proceso (inverso) de desapalancamiento financiero de las empresas no financieras y de las familias canarias, más acelerado y persistente que en el conjunto de la economía española. Este problema ha generado en la economía canaria una mayor caída relativa de todos los indicadores de actividad productiva y de gasto privado que en el resto de España, lo que reflejaría un mayor reajuste a la baja en las decisiones de inversión de las empresas y en las decisiones de consumo de los hogares canarios. Por ejemplo, se puede observar en el Gráfico 2 una contracción más acusada (en promedio hasta septiembre de 2009 frente a septiembre de 2008) de las matriculaciones de vehículos (industriales y turismos) en Canarias (-40,0%) que en el conjunto de España (-33,3%). También es indicativo del proceso de desapalancamiento financiero (véase Gráfico 3) la mayor caída de las ventas de comercio al por menor (en promedio hasta septiembre de 2009 frente a septiembre de 2008) en Canarias (-7,5%) que en España (-6,9%).
Finalmente, la crisis financiera internacional y la recesión económica a nivel global se ha trasladado también a una caída sustancial de la demanda exterior de la economía, lo que ha afectado negativamente a las regiones españolas más orientadas a la actividad exportadora y al turismo extranjero. Este elemento diferencial ha vuelto a repercutir negativamente en la economía canaria, muy expuesta a los flujos turísticos internacionales, de Alemania y el Reino Unido, principalmente. En concreto, la ratio del gasto de los turistas extranjeros en relación al PIB (promedio 2004-2008), alcanzó un 26,4% para Canarias, frente a la media del 5,0% del conjunto de España. Por ejemplo, en el mes de setiembre de 2009 la caída interanual de turistas extranjeras se ha situado en el -14,4% para Canarias frente al -9,8% del conjunto de España. En definitiva, la intensa caída del turismo extranjero durante 2008 y 2009 ha sido otro de los factores diferenciales negativos que ha provocado una mayor caída relativa de las tasas de crecimiento económico y del empleo de la economía canaria frente al conjunto de la economía española.
En síntesis, la mayor exposición al sector de la construcción, el mayor apalancamiento financiero de las empresas y familias, junto a la mayor dependencia del flujo de turistas extranjeros son los tres principales factores que han incidido en el mayor deterioro relativo del crecimiento económico y de la destrucción de empleo de la economía canaria. En el Gráfico 4 se presenta el ranking de destrucción de empleo de la distintas regiones españolas y del conjunto de España desde el inicio de la crisis económica (variación en % entre el segundo trimestre de 2007 y el tercer trimestre de 2009). Las cifras ponen de manifiesto como la mayor vulnerabilidad relativa de Canarias a los tres factores mencionados ha provocado que la región lidere la caída del empleo (-13,5%) de las distintas CC.AA, registrando un amplio diferencial negativo en relación a la caída de la ocupación en el conjunto de la economía española (-8,0%).